Nació en Cocentaina (Alicante) y recibió el bautismo el 20 de noviembre de 1869. Fue hijo de José, médico, y Milagro, quienes formaron un hogar cristiano con 14 hijos, de los cuales dos serían sacerdotes, ambos mártires. En 1890, al terminar los estudios de bachillerato, ingresó en el Seminario Central de Valencia, logrando en los exámenes las mejores calificaciones y obteniendo el grado de Doctor en Teología. Ordenado sacerdote en 1893, ejerció siempre el ministerio en su pueblo natal, trabajando mucho con los jóvenes. Fue confesor de religiosas de distintas comunidades de la población; desempeñó con singular acierto el cargo de administrador del Hospital y Asilo de Ancianos Desamparados; cooperó con entusiasmo en las obras de la Casa de las Hermanas Trinitarias, dotando de espaciosas aulas al Colegio de primera y segunda enseñanza. Fue constantemente solicitado como orador sagrado en las principales festividades locales y comarcales. Su vida estuvo consagrada a las obras de beneficencia, caridad y apostolado. En los meses que precedieron a la persecución religiosa, don Elías se daba perfecta cuenta de la gravedad de aquellos momentos, aunque no por eso decayó su ánimo. Al contrario, siempre procuró por los demás sacerdotes, él era el asesor de todos, a él acudían los compañeros y atendía sus necesidades materiales.